Los envases metálicos con tapa son de gran utilidad para almacenar y mantener eficazmente cualquier tipo de contenido.
Sabemos, además, que los envases metálicos, con o sin tapa, aportan otros beneficios más allá de lo que contengan y uno de ellos es, por ejemplo, la sostenibilidad medioambiental.
Este tipo de packaging alcanza la mayor puntuación en los factores que miden la responsabilidad medioambiental. Actualmente en España son los envases más reciclados, alcanzando el 84,5%.
El metal, debido a sus propiedades, puede reciclarse un número indefinido de veces y no perder sus propiedades. Lo que lo convierte en un material muy valioso para el futuro de los envases ya que es permanente.
Algunos de los beneficios de este tipo de envase son:
– Protección: Los envases de metal presentan una gran resistencia a la corrosión y protegen el contenido de manera eficiente del aire, de la luz y son impermeables, lo que los hace idóneos para conservar productos perecederos ya que no influye en ninguna de sus características (olor, sabor, color, entre otras).
– Versatilidad: son un continente ideal para todo tipo de productos, permiten envasar desde alimentos frescos a productos gourmet y delicatessen, cualquier tipo de contenido que puedas imaginar.
– Resistencia: la vida útil de este formato de envase es de sobra conocida.
– Personalización: Este material tiene numerosas posibilidades de personalización ya que su forma es moldeable y su superficie permite la impresión en ella. Este material esta dotado de una buena adhesión de imágenes impresas, tintes o lacas.
Branding y envases metálicos
Atendiendo más a términos de ventas y branding, el mercado tiene una marcada tendencia dirigida hacia los envases más personalizados y exclusivos que combinen el mantenimiento del producto con el carácter único e inimitable del mismo y su marca.
Hoy en día podemos crear envases metálicos con tapa con impresiones en relieve y tintas fluorescentes u holograma, así como decoraciones que estén formadas por más de seis colores. Todo esto hace que los envases metálicos sean un magnifico aliado para aportar diferenciación y flexibilidad a tu marca.
Los avances en la fabricación de envases metálicos permiten que se cree un packaging adaptado específicamente a las necesidades de cada tipo de cliente mediante el uso de diferentes formas y aspectos que se diferencian completamente de la competencia. De, este modo, se genera un estímulo visual en el consumidor lo suficientemente potente como para llamar su atención.
A la hora de elegir un envase, el que va a ser nuestro packaging, se debe tener en cuenta tres aspectos clave:
1. Tamaño. Este aspecto es muy importante de cara al consumidor. Durante los últimos años, los envases pequeños han crecido en volumen de ventas en el sector del envase y embalaje.
2. Diseño. Llamar la atención del consumidor es también un aspecto crucial ya que puede resultar decisivo para su elección de compra. Lo que debemos hacer es contar con un buen diseño (atendiendo siempre a la estética de la marca) que incluya los colores corporativos de la marca, así como el logo.
3. Originalidad. Los estudios confirman que los consumidores a primera vista dirigen su atención a los envases que son diferentes al resto de un producto concreto. Por lo tanto, es una buena idea incluir algún tipo de innovación en su diseño que otorgue al producto carácter y personalidad.
Si estás pensando en cómo incrementar la calidad de tu producto en todos los aspectos, dándole un giro a su envase, no pierdas la oportunidad de ponerte en contacto con nuestra empresa de envases metálicos personalizados, Litochap. Resolveremos tus dudas de manera profesional adecuándonos a tu proyecto.