Litochap es una de las empresas que forma parte de la Asociación Metalgráfica Española, una agrupación que desde hace cerca de cien años, trabaja para conseguir que el metal ocupe su merecido lugar en la industria. No solo por su alta funcionalidad sino por su característica de reciclabilidad infinita. Condiciones que lo han convertido en una de las mejores opciones de envasado y en baluarte de la Economía Circular. Hace poco pudimos charlas con AME y aquí os dejamos la entrevista que les hicimos.
¿Cuándo y cómo surgió la Asociación Metalgráfica Española?
La AME nace en 1927, siendo una de las primeras asociaciones empresariales del país.
La asociación agrupa a empresas fabricantes de envases y cierres metálicos (tanto de acero como de aluminio), tapas, tapones y precintos metálicos, y actividades afines como la decoración y barnizado de planchas metálicas y su estampación.
Los distintos fabricantes miembros de la asociación se unen buscando fomentar el uso del metal como material de envasado.
¿Cómo y cuándo se apostó por «el metal se recicla para siempre»?
Desde el inicio de AME. La base de nuestra actividad es el metal, más en concreto los envases y cierres, y su reciclabilidad infinita es una de las principales cualidades de este material.
Siempre tratamos de comunicar todas las ventajas del metal como material idóneo de envasado frente a otro tipo de envases o cierres, pero sin duda los beneficios más relevantes son los de carácter medioambiental. Los envases y cierres metálicos pueden reciclarse una y otra vez sin perder ninguna de sus propiedades originales.
Recientemente, hemos puesto en marcha una campaña de comunicación con este lema: El metal se recicla para siempre.
¿De qué organizaciones internacionales forma parte?
A nivel europeo, AME es miembro de Metal Packaging Europe, la asociación europea que engloba a los productores de envases metálicos rígidos y sus socios de la cadena de suministro. También de Cetie, el Centro Técnico Internacional de Embotellado, donde también están incluidos sus cierres metálicos.
Con carácter nacional, también tenemos importantes alianzas. Formamos parte de Concecoi (Confederación Empresarial del Ecoenvase Industrial); Ecoacero (Asociación Ecológica para el reciclado de la Hojalata); Confemetal (Confederación Española de Organizaciones Empresariales del Metal) y Packnet (Plataforma Tecnológica Española de Envase y Embalaje).
¿Por qué el metal se considera uno de las mejores opciones en la Economía Circular?
El metal es un material permanente y, como tal, no pierde ninguna de sus cualidades durante el proceso de reciclado. Por eso decimos que el metal es infinitamente reciclable, porque, independientemente de cuántas veces se someta al reciclado, al final de esta fase siempre se obtendrá una materia prima idéntica a la original.
Por tanto, al reciclar un envase o cierre metálico en el contenedor amarillo contribuimos a que entre en el ciclo de economía circular y se convierta, en el futuro, en otro objeto metálico. De hecho, se estima que un 80% del metal jamás producido, todavía sigue en uso; y esto solo puede ser posible gracias a la economía circular.
¿Qué aporta el uso del metal como packaging al medio ambiente?
Lo más evidente, como ya hemos comentado anteriormente, es su reciclado infinito y su importancia en el sistema de economía circular.
Pero esto da lugar a otros beneficios medioambientales. Por ejemplo, gracias a la permanencia del metal, se puede evitar y reducir las extracciones de nuevas materias primas. Además, la fabricación de nuevos envases y cierres metálicos a partir de metal reciclado permite ahorrar recursos y, sobre todo, se reduce la emisión de gases de efecto invernadero.
Con una historia de cerca de cien años, ¿podemos tener datos de uso, reciclado y reutilización del metal en España desde vuestros inicios hasta ahora?
No disponemos de una histórica de tanto tiempo, pero los datos más actuales recogidos si muestran una clara tendencia a la concienciación social en temas de reciclaje.
En 2019, la tasa de reciclaje de acero y aluminio conjunto era de 83,1. Sin embargo, en los últimos años, esta cifra se ha mejorado hasta el 86,4% que se marcó en 2021.
Aunque nuestra meta es seguir incrementando estas tasas, estamos muy orgullosos de haber alcanzado, mucho antes de la fecha estipulada, los objetivos establecidos en material de reciclaje para 2025.
Desde el punto de vista de la Asociación Metalgráfica Española ¿ha aumentado la concienciación de los industriales frente a la necesidad de la sostenibilidad?
Ha aumentado muy notablemente, sí. Y aunque siempre hay margen para continuar mejorando, tres son las cuestiones que se muestran clave en la positiva evolución de los procesos de nuestras industrias para reducir la huella ambiental de la industria de envases y cierres metálicos:
Mejoras continuas en el propio proceso de fabricación de los envases que van desde medidas generalizadas de eficiencia energética o incremento de la aportación de energía verde utilizada en procesos de fabricación de envases, hasta reducciones significativas en el consumo de agua por unidad de producto o impactos derivados de las importantes inversiones del sector en la sustitución de equipos.
Reducción sostenida en los últimos años del espesor de los envases En los últimos 20 años se ha conseguido producir latas de aluminio que son un 28% más ligeras y lo mismo ocurre con los envases y cierres de acero, que han aumentado su ligereza en un 33%
Incremento sostenido de tasas de reciclado de envases de acero y aluminio, gracias a la infinita reciclabilidad de un material que es materia prima secundaria para un amplio colectivo de sectores. Por ello, con nuestra campaña “el metal se recicla para siempre” intentamos concienciar a los consumidores de la importancia que tiene un gesto tan sencillo como depositarlos en el contenedor amarillo para que puedan ser recuperados los envases y cierres metálicos
